Europa tiene un dicho: “Dios debe ser suizo”. Con sus impresionantes paisajes y su exquisita gastronomía, Suiza atrae a viajeros de todo el mundo. Ubicada en las altas latitudes de Europa Central, Suiza se enorgullece de tener una contaminación mínima y una próspera industria láctea, produciendo quesos de alta calidad y reconocidos mundialmente. Muchos de los platos icónicos del país giran en torno al queso, y entre ellos, el famoso Fondue de Queso se destaca como el plato nacional.
Las estadísticas muestran que el Fondue de Queso y el chocolate son los alimentos más consumidos en Suiza. Durante los largos meses de invierno, disfrutar del Fondue de Queso con familiares y amigos después de esquiar es una tradición celestial. Para los visitantes, probar el Fondue de Queso es la mejor manera de experimentar la excelencia culinaria suiza.
A diferencia de las comidas tradicionales occidentales, donde cada comensal tiene su propio plato, el Fondue de Queso es un plato comunal. Imagina una olla de cerámica colorida llena de queso derretido dorado, burbujeando y liberando un rico aroma de lácteos y vino: es un festín para los sentidos.
Los Orígenes del Fondue de Queso
Los orígenes exactos del Fondue de Queso son debatidos, pero una teoría ampliamente aceptada lo remonta a las regiones alpinas. Los largos y duros inviernos dificultaban el acceso a ingredientes frescos para los celtas, por lo que conservaban la leche convirtiéndola en queso usando carbón y ramas de pino. Este queso se convirtió en una fuente vital de calor y nutrición durante el invierno.
El gobierno suizo valora su herencia quesera, asegurando su pureza al regular estrictamente la producción y el procesamiento. Inspirado por las leyes francesas del vino, Suiza exige que cada región solo pueda producir su propio queso, preservando métodos tradicionales y evitando la contaminación industrial. Hoy en día, el Fondue de Queso es un elemento básico en los banquetes estatales suizos.
La Base del Fondue de Queso
Con el tiempo, los quesos tempranos evolucionaron en variedades famosas como Gruyère, Emmentaler y Raclette, que ahora son las bases más comunes para el Fondue de Queso.
1、Gruyère: Originario de los Alpes suizos occidentales, el Gruyère es conocido como el queso más mágico de Suiza. Se dice que contiene 75 sabores herbales, atrayendo a innumerables visitantes. Sus suaves rebanadas de color marfil son ricas y versátiles, perfectas para picar, acompañar con vino o como ingrediente clave en el Fondue.
2、Emmentaler: Producido en el centro de Suiza, el Emmentaler es uno de los quesos más grandes del mundo, a menudo vendido en ruedas que pesan entre 75 y 120 kg. Sus característicos agujeros son causados por el dióxido de carbono durante la fermentación. Con un sabor suave, cremoso y a nuez, es ideal para tablas de quesos, hamburguesas o ensaladas.
3、Raclette: Nombrado por la palabra francesa que significa “raspador”, el Raclette a menudo se derrite y se raspa sobre papas hervidas, servido con carne seca, encurtidos y vino de cereza. Este queso, de la región de Valais, se disfruta mejor caliente, lo que lo hace perfecto para el Fondue.
Tipos de Fondue de Queso
Suiza ofrece una variedad de estilos de Fondue de Queso:
1、Moitié-moitié: Mitad Gruyère, mitad queso Vacherin.
2、Fondue Vaudoise: Hecho con 100% Gruyère.
3、Appenzeller Fondue: Usa 100% queso Appenzeller con crema añadida.
4、Fondue de Suisse Centrale: Una mezcla de Gruyère, Sbrinz y Emmental, reflejando la neutralidad de Suiza.
5、Fondue Neuchâteloise: Mitad Gruyère, mitad Emmental, con un aroma a nuez.
Para sabores únicos, prueba:
1、Fondue de Champiñones: Mitad Gruyère, mitad Vacherin, con champiñones silvestres.
2、Fondue de Tomate: Mitad Gruyère, mitad Emmental, con salsa de tomate fresca.
3、Fondue Picante: Gruyère con pimientos verdes y rojos.
4、Fondue Fribourgeoise: 100% Vacherin, servido con papas en lugar de pan.
Fondue de Verduras: Una opción más ligera con calabacín en lugar de pan.
Cómo Disfrutar el Fondue de Queso
El clásico Fondue de Queso suizo comienza con una olla frotada con ajo. El queso triturado se derrite sobre un quemador de alcohol, luego se mezcla con almidón, vino blanco, brandy, tomates o ajo para crear una salsa cremosa. Se añade pimienta negra para dar sabor. Los comensales usan tenedores largos para sumergir cubos de pan en el queso.
Al principio, el Fondue de Queso puede no parecer atractivo debido a su fuerte aroma. El pan cubierto de queso está caliente y masticable, pero el sabor crece en ti. Añadir pimienta negra realza el sabor.
Una divertida tradición local: si dejas caer tu pan en la olla, ¡podrías enfrentar una penalización juguetona!
El Fondue de Queso es versátil, con opciones para sumergir verduras, frutas o carnes. A menudo se acompaña con carne seca, encurtidos o cebollas para cortar la riqueza. El vino blanco local es la bebida clásica, aunque el vino tinto, el vino de cereza o el té también son populares.
Aunque no es tan diverso como el hot pot chino, el Fondue de Queso tiene su propio encanto. En un frío día de invierno, con nieve cayendo afuera y un fuego crepitando en la chimenea, reunirse alrededor de una olla burbujeante de Fondue de Queso llena el aire de calidez y alegría.